Ah, Movistar+. El VHS de nuestros
tiempos. La mierda que tenemos todos en casa.
Aunque no tengas Internet contratado
con Movistar me da igual, porque creo que las demás operadoras
también venden su mierda. Vodafone te quiere seducir diciéndote que
te vienen de gratis las primeras series de la HBO, como Los Soprano.
¡Cáspita! ¿Cómo resistirse a Vodafone entonces?
No, es broma. Me resisto sin problemas.
Cuando mi amigo Manolo y yo fuimos a
Nueva York él quería visitar el restaurante de Los Soprano, donde
comía el protagonista o algo así. A Manolo le perdono que le gusten
Los Soprano porque a él le gustan por el rollo machote, ya que
Manolo es mazo de macho.
Él no entiende de mierda hipster y por
eso le aprecio tanto.
Todo lo que se ha hecho después de
Steve Urkel es una mierda. ¡Todo! ¡Todo! No salvo nada de la quema.
Steve Urkel fue el final de las grandes series.
Bueno, vale, están Friends, Seinfeld,
Frasier, Los Simpson, vale. Pero esos no cuentan. Es evidente que
esas series son buenas, por eso no había que pagar por ellas. Ya me
dirás tú por qué un guión de Los Soprano es mejor que uno de
Cosas de Casa. ¿Porque el protagonista va al psiquiatra? Oh. Qué
profundo.
Y el señor ese que habla de la cocaína
en plena Puerta del Sol, ¿quién es? ¿No sabe Netflix que por la
Puerta del Sol pasan niños? Los niños se harán adictos a la
cocaína por culpa de Netflix. No queda otra opción.
Narcos. ¡Menuda serie! El tráfico de
drogas no es una cosa para ponerla por la tele como si fuese cosa de
risa. ¿No?