Ah, Rusia. Qué país más bueno. A mi
los rusos me caen de perillas. Son duros como la nieve de Siberia.
Qué gente más alucinante.
Los rusos son megamachos, comen oso
para desayunar y para comer matan otro oso. En Rusia hay muchos osos.
Lo que más se come en Rusia es oso,
porque es de lo que más hay. Creo que hay osos en todas partes. Son
como aquí las moscas o el ajo.
Como comen tanto oso son fuertes como
osos. Aquí se supone que teníamos que ser tan listos como un ajo,
pero ya ves. Esta lógica tiene sus lagunillas.
Y como son fuertes como osos se
entienden estupendamente con Trump, que también es tan fuerte como
un oso. Donald Trump te devora como un oso si te dejas.
¿Cómo se podrá detener a Trump? Es
con lo que ahora me devano la cabeza. Es muy fuerte. Yo no sé si a
este tío se le puede ganar con la fuerza. Este es el más fuerte de
todos.
Habrá que llamar a los podemitas, que
son unas putas que ya-ya.
Las putas detienen a los hombres
fuertes porque saben dónde les da gusto. Y cuando les tienen
desarmados ¡zasca! les inyectan su veneno de víboras. Observando la
naturaleza se puede comprender el mundo de los hombres.
Y así el mundo sigue girando, con osos
que pisan víboras y con víboras que envenenan osos. Aleluya.