El dios de la energía es sin duda la
mayor fuente de poder. Si necesitas poder, no lo dudes: rézale al
dios de la energía.
El dios de la energía, naturalmente,
escuchará tus oraciones si no está ocupado cargando el smartphone.
¿Al dios de la energía se le acabará la batería del teléfono o
eso es imposible? ¡Cuántas preguntas!
El dios de la energía se peina hacia
atrás con gomina, estilo Mario Conde pero menos formal. El dios de
la energía tiene un sex appeal salvaje que le gusta mucho a las
mortales.
El dios de la energía, por alguna
razón, no viste con túnica. El dios de la energía lleva vaqueros y
los domingos Dockers. El dios de la energía está cansado de los
convencionalismos alrededor de las deidades.
El dios de la energía tiene problemas
con la fibra de Movistar, como todo el mundo. El dios de la energía
paga un riñón al mes para que al final no le funcione el wi-fi. El
dios de la energía cree que la privatización de Telefónica no fue
tan buena idea como el relato habitual narra.
El dios de la energía tiene bidé pero
lo usa poco. El dios de la energía se limpia la cola de esmegma con
la alcachofa de la ducha. El dios de la energía se la deja
reluciente.
Como veis, los dioses tienen los mismos
problemas que vosotros. La única diferencia es que ellos no se
quejan tanto.
Los mortales lo sois porque sois
débiles para con la rectitud de vuestras acciones. No tiene nada que
ver con llevar túnica o barba blanca larga. Tiene que ver con
obedecer más o menos las órdenes de Dios, Aquel que está por
encima del dios de la energía.
El dios de la energía lleva una vida
de mortal corriente pero es el dios de la energía. ¿No es algo así
como superchulo, supermolón? ¡Pardiez! Superchulo y supermolón es
poco.