Estoy muy contento porque Risi ha
sacado su propia marca de cocktail. Las marcas de cocktail es como un
all stars de las fábricas de snacks salados. En ellas se despliegan
todas sus estrellas para gozo del consumidor.
Risi no es tan grande como Matutano,
por eso es tan guay. Matutano es la supercorporación de snacks, es
como si los snacks los hubieran inventado ellos. Matutano siempre
acierta y además siempre marca la pauta. Por eso es bello ver cómo
Risi va tirando tan bien como lo hace.
Surtis 4U lleva cuatro variedades Risi:
Risketos, Triskis, Buscalíos y Match Ball. Los Risketos y los
Triskis no necesitan presentación; los Buscalíos son unos Doritos
cuadrados muy sabrosos (muy top, los Buscalíos) y las Match Ball son
bolas al queso. Está claro que Risi ha conseguido una plantilla
titular competitiva. Con esta alineación uno puede ir por Europa con
la cabeza bien alta.
Risi es más de tiendas de golosinas
que de supermercados, que es más patrimonio de Matutano. Risi es
guay porque está siempre cerca de los niños, como Michael Jackson o
Santa Claus. Todos queremos que a Risi le vaya bien porque de
pequeños nos recordamos jugando en la calle con una bolsa de Risi,
no de Matutano.
Risi lo está haciendo
sorprendentemente bien. No recuerdo otra época de esplendor de Risi
tan grande desde que sacaba sus bolsas de Pajitas. Risi ha mantenido
su espíritu infantil sin darle la espalda a los tiempos, que están
llenos de esteroides y de polvos de culturista.
Risi tiene más historia y cae mejor
que otras de sus competidoras, como Grefusa y Tosfrit. Grefusa lo
intenta mucho vía publicidad pero no acaba de cuajar. Debe ser por
culpa de sus Gublins, que tienen un sabor tan extraño que lastra a
toda la marca.
Tosfrit es la marca de las gasolineras
de provincias, que es donde llega su distribución. Siendo justos,
hay que reconocer que Tosfrit está haciendo un esfuerzo importante
porque la tengo vista bastante últimamente en los chinos de Madrid.
Como veis, ir a museos es propio de
retrasados mentales. Es mucho mejor apreciar el arte en cada esquina,
como Juan. Juan no gasta un duro en el puto Reina Sofía porque es un
coñazo. ¿Qué arte más moderno que una bolsa de Surtis 4U puede
haber ahí dentro? Ahí dentro todo lo que hay es una puta mierda,
hombre.
Haced caso a Juan y comprad bolsas de
aperitivos salados. Vuestro bagaje cultural, aunque raquítico y
patético, os lo agradecerá.