sábado, 27 de diciembre de 2014

Le Male falso

Tampoco es plan de incidir en demasía en el tema este de que "el rollo copia de Indonesia mola", porque creo que ya está bastante clarito, pero bueno, hoy nos lanzaremos más a la pasión que a la devoción, más a algo que me divierte que a abnegarme a esta cátedra que imparto, y encima gratis. Molar también significa relajarse de vez en cuando. 


Supongo que si sois medianamente modernos os compraríais allá por 1998 una botellita de Le Male, de Jean Paul Gautlier. Esa botellita, junto a la de Farenheit de Dior y a la de Hugo de Hugo Boss, formaban parte de un pack no necesario pero sí suficiente para ser un chico que empezaba a decir que las cosas "de chica" no tenían por qué ser sólo para chicas, como los perfumes. Sí, eran tiempos en los que llevar adelante ese caballo de batalla era importante.

Como ya bien todos sabemos, hoy en día esa idea no está sólo desarrollada e implementada, sino que está tan sobada que dan ganas de, alegremente, vomitar. ¡Qué hartazgo el ir oliendo a maricas fuera de onda y canis que han descubierto que "las cosas 'de chica' no han de ser, necesariamente, sólo para chica"! ¡Qué poca vergüenza tienen! ¡Qué manido es su discurso! ¡Qué poco interesante es lo que dicen con su forma de estar en el mundo!

No puedo evitar soltar sin querer alguna que otra lección moderna; pero en fin, sigo. ¿Qué os parece este puto horror de copia que se han gastado los chinazos estos? ¡Vaya huevos más macus! ¡Y por menos de 5 pavos! ¿Quién podría resistirse? Yo no.

Y los abdominales están "así como mal". ¡Qué huevazos! ¡Qué cara más dura! ¡Cómo mola! Por no hablar de lo que mola que los esclavos del mundo, el sudeste asiático, les meen en la cara a sus amos copiándoles sin respeto sus "finísimas y excelentísimas creaciones". ¡Sí señor! ¡Ya que el faraón nos tiene esclavizados, al menos disfracémonos como él! ¡Qué risa! ¡Qué bella forma de hacerle un corte de mangas al gachó!

Como veis, estas ideas dan para mucho. Pero no me quiero poner geopolítico. Tenemos tanto, tanto tiempo...