lunes, 25 de septiembre de 2017

Viajes de Gulliver

Según tengo entendido Gulliver fue tanto al país de los enanos como al de los gigantes. O sea, que Gulliver sabe lo que es sentirse una mierda y lo que es sentirse un titán. ¿Por qué Gulliver no da más conferencias en el TED y esas cosas?


Si sabes lo que sabe Gulliver ya no tienes más problemas en la vida; has probado el faisán y la mierda recién cagada. Si sólo has probado el faisán sobre ti sobrevuela la amenaza de que cualquier día de estos te toca comer mierda. Y comer mierda no le gusta a todo el mundo, a ver si vas a perder la compostura y quedas fatal delante de todos tus amigos y compañeros.

Puede darse el caso contrario, que tú toda la vida te la hayas pasado comiendo mierda. Si nunca has comido faisán no sabes las normas básicas de comportamiento de la alta sociedad así que cuando te toque comer faisán harás el ridículo de impepinable manera.


Sin embargo si tienes el bagaje de Gulliver ya está todo arreglado. Puedes desenvolverte en los arrabales y en la corte de los reyes. ¡Qué nivel, Maribel! Es el momento de comprarse un Renault Megane, según reza su publicidad.

Un Renault Megane es para aquellos hombres que ya se sienten sueltos en cualquier parte, como el caso que acabamos de explicar. Si conduces un Megane le dices al mundo y a las mujeres que tú eres un todoterreno de la vida y por lo tanto de la sexualidad. Que tú no tienes problemas sean cuales sean las circunstancias, que tú siempre vas a poder proteger a la hembra de los elementos.


A mi me parece muy bien mientras la hembra haga un contrato de gananciales. Si la hembra no tiene un piso comprado y no pone la mitad a mi nombre que le den por el culo a la hembra del demonio. A mi que me paguen mis servicios de protección ante los elementos o puerta, que será por hembras desprotegidas. No hay otra cosa. Das una patada y salen 200 hembras desprotegidas.

Como la demanda supera ampliamente a la oferta los precios suben, eso lo sabe cualquiera. Así que, guapa, pon el piso a mi nombre o no hay trato. ¿Qué te has creído? ¿Piensas que las cosas se hacen por tu cara bonita? Eso era a los 20 años, ahora yo no diría que tu cara es bonita ni mucho menos.


Como tu cara de bonita ha pasado a ser feíta tienes un arma menos que esgrimir, así que punto para Juan. Yo trago con lo de que ahora seas feíta pero tú tragas con lo de que estar conmigo ya no es gratis. Que ahora hay que pagar. Soy como la clásica startup que de repente se vuelve de pago, ¿comprendes? Y como ya te has viciado a mis servicios pagas porque no te queda más remedio.

Sí, puedes esperar a que aparezca otra startup de mis mismas características pero los dos sabemos que eso no va a ocurrir. Soy como el peaje de Guadarrama, puedes irte por la Nacional algunas veces pero a la larga acabas pagando. Así que ¡venga! ¡A retratarte! ¿Cuánto llevas encima? ¡Qué poco! ¿No te iba de puta madre, asquerosa?