Retrolink tiene mucha fama entre la
comunidad retrogamer. Retrolink fabrica esos control pad que ya no
existen y que uno inexorablemente necesita para dar retrorealismo a
sus partiditas.
Si hay que comprar un solo control pad
la mejor opción es el segundo de Saturn. El segundo de Saturn es
como el segundo de Mega Drive pero mejor. Las dos líneas de tres
botones tienen ese sabor arcade ya tan ampliamente olvidado y que
Sega supo dar a sus productos.
En un mundo completamente aturdido por
la retórica del speaker de TED se ha olvidado por qué funcionan las
cosas. Las sensaciones, las cuestiones primarias es lo que hace que
un juego de lucha pase de ser mediocre a todo un Street Fighter IV.
¿Por qué Street Fighter mola más que Fatal Fury? Porque Capcom
supo crear una detección de colisiones mucho más jugosa. Cuando
pegas a alguien en Street Fighter sientes que has dado una hostia del
copón, en Fatal Fury yo diría que no.
¡Qué importante es el trabajo del
programador, ahora que todo el mundo es director creativo de alto
copete! Podrás tener ideas muy soberanas pero si el programador pasa
de tu pomposo culo jamás tendrás un juego bueno. Lo importante de
un juego es que sientas los saltos, las estocadas y la exploración
de la fase. Si eso falla, por muy grandilocuente que sea tu concepto,
te quedarás en calzoncillos. ¡Que se lo digan si no al millennial
creador de No Man´s Sky, apoyado en su fracaso por el simpático y
presuntamente fraudulento Peter Molyneux!
Aquí todo el mundo ha aprendido a
conceptualizar pero ni el apuntador ha aprendido a programar.
Programar no es glamuroso, es cansado y sacrificado. Los
programadores no van a fiestas porque se tienen que quedar hasta
tarde programando. Los programadores no son simpáticos porque tienen
toda la energía enfocada en hacer un código bello. Sin embargo los
canapés se los come Peter Molyneux.
Peter Molyneux, por si no lo sabíais,
era un icono del éxito de la industria ahora reconvertido en icono
del ridículo y del vodevil. Cuando a Peter le apretaron las tuercas
su rollo vendehumos dejó de funcionar y se vio lo que realmente
había estado allí siempre, pero detrás de una pantalla de engaños:
Peter Molyneux era un paquetillo que nos la había colado a todos.
Como supongo que no querrás llegar a
viejo y que todo el mundo se ría de ti a saco (pero a saco se ríen
de Peter) te insto a que hagas las cosas correctamente. Te insto a
que hables poco y hagas mucho. Es mejor que se rían de ti de joven
porque hablas poco, porque cuando eres joven puedes aguantar las
risas, porque eres joven. Cuando eres viejo cualquiera sabe, igual se
ríen de ti y te da un pallá. ¡No te la juegues, mi lector
bienamado!
¿No es bello hacer las cosas bien? ¿No
es bello vestirte por los pies en vez de ir todo el día preocupado
por que te pillen? Si haces un trabajo honesto eres invulnerable
porque ¿qué te van a decir? ¿Que tu trabajo es demasiado honesto?
No, amigos, ir por la vida montando el numerito y no dando palo
alguno al agua es lo que nos ha traído hasta aquí. No sé tú, pero
yo paso de ofrecerle pufos a la gente. A mi eso no me gusta.
En cambio Juan te ofrece sabiduría
milenaria en un confortable y conveniente envase ultramoderno. ¿Es o
no Juan la polla con cebolla? Puedes decirlo, te doy permiso.