miércoles, 27 de julio de 2016

Duke Nukem Forever

¡Balls of steel! ¡Balls of steel! Sí, Duke Nukem sí que sabe de qué va la movida.


Este fue ese juego que tardó tanto en salir (no sé cuántos años pasaron, pero una burrada) y que a la gente, que es tonta, le gustó poner a parir. Sin embargo, a mi me encantó. La misma gente, esa que es tan tonta, ya sabes, puso a parir a la nueva de Star Wars por el mismo motivo que pusieron a parir a DN Forever: porque respetaba el original y no quiso hacer ningún alarde que engrandeciese el ego del director. Ay, qué poco sabe la gente. Lo poco que hay que hacerla caso. No os lo podéis ni imaginar.

A ver, tontines: si te dan una gran franquicia no puedes fliparte. No puedes llegar de superestrella a “hacer algo nunca visto”. Tienes que agachar la cabeza porque estás ante algo más grande que tú. Tienes que entender cuál es el corazón de esa obra que te precede y desarrollarlo con una ejecución lo más responsable posible. Y tus cabriolas han de acabar todas de pie. No puedes permitirte un paso en falso. Si vas a hacer cabriolas ya puedes ser bueno haciéndolas, si no habrá que dar entrada a otro menos arrogante. O que sepa aterrizar.

Duke Nukem Forever va de lo mismo que Duke Nukem 3D, el primer éxito de Duke. Va de un tío con unas pelotas de acero que se caga en todo el mundo porque él es el mejor. Y un carácter tan epatante no puede dar sino lugar a una historia divertida. Duke Nukem Forever es eso también, no falla en ningún aspecto. La acción nunca te aburre, las frases de Duke siguen siendo cojonudas y todo marcha estupendamente. ¿Cuál es la pega entonces? Criticar por criticar, me temo. El virus del niño rata.

Yo me he acabado este juego y eso es una gran señal, porque vive Dios que me acabo poquísimos juegos. Todos me aburren antes de eso, créetelo. Mantener mi interés no es tarea fácil y DN Forever lo ha conseguido. ¿Qué problema tendrán los niños rata con FFXIII, con DNF? ¿Merece la pena estudiar a un niño rata? Mi teoría va en línea con la de Lisa Simpson: el motivo no es psicológico, es fisiológico. Hay gente con genes inferiores que simplemente no está preparada para determinados estímulos superiores. No sabe entender ciertos giros, no ve la grandeza de las cosas, vive ciego en una oscura cueva. Así que su reacción ante las cosas superiores a ellos es de rechazo, de violencia. Es como entrecerrar los ojos ante un fogonazo de luz. Así que supongo que simplemente hay cosas que son demasiado para su raza poco evolucionada.


¿Te entristece? Hombre, a mi un poco, no te lo voy a negar, pero también te tengo que decir que lo tengo superadillo. No es fácil asimilar que vives en una cochiquera con animales de baja ralea, pero cuando lo asimilas te alegras mucho porque cuanto más inferiores sean ellos más superior eres tú. Y con saber esquivarles un poco, cuatro clases, no te manchan con sus sucias manos.

Así que se me torna soportable que la crítica caiga sobre un juego fabuloso.