Hoy hablaremos de una de esas marcas de
snacks desconocidas, que son estupendas porque te hacen pensar que
los recursos se dedican a la mejora del producto antes que al
marketing.
Tampoco diría que este producto es la
pera. Está bastante peor que Matutano de lejos. Pero como te
imaginas al señor Don Frutos todo ilusionado con su empresa pasas
por alto el sabor regular y juegas a su juego.
Imagino que Don Frutos es cómo
llamarían a Paco Frutos en su etapa liderando Izquierda Unida, ¿no?
¡Don Frutos! ¿Qué hacemos? ¿Nos reunimos con los sindicatos o
vamos a tomar café? Lo que usted diga, Don Frutos. Qué risa.
En la bolsa no pone por ninguna parte
qué variedad de snacks son. Sólo pone Don Frutos Snacks y que están
hechos con puro aceite de girasol y que no tienen gluten. ¿Veis lo
que pasa? Que tanto blablabla la gente acaba quedándose con lo
accesorio y dejando de lado la clave de la cosa, que es el nombre de
la puta variedad de snacks.
Que no ponga el nombre de la variedad
de snacks hace pensar que esta es la única variedad que tienen. Pero
me parecen una variedad muy rara para ser la única. Son como unas
pajitas al ketchup cuadradas y huecas por dentro. Me parece una
elección demasiado especialita para ser la única.
Total, que me imagino que la oferta de
Don Frutos serán un montón de variedades todas metidas en bolsas
iguales. ¡Bueno! A mi me parece interesante. Ya sé cómo se hacen
las cosas. Me interesa más saber cómo no se hacen. Por ahí se
puede sacar algo. Lo otro ya está tan perfeccionado que ha dejado de
tener sentido real.
Don Frutos es lo que deberían hacer
los emprendedores hipsters, pero como están tan acostumbrados a que
la gente flipe con los guays que son (cuando no lo son ni por asomo)
no pueden prescindir del barniz guay para ir por la vida. Así que
todos montan negocios guays por fuera pero innecesarios por dentro.
¿Por qué? Porque son tontos. No os dejéis amedrentar sólo porque
lleven ropa vistosa, amigos contables.
Si quieres montar un negocio tienes que
olvidarte de ir a tomar cañitas a La Latina. Tienes que disponerte a
hacer el ridículo unos cuantos años, porque antes eras guay y ahora
estás pelao. Si puede más tu vergüenza a lo que digan tus amigos
que tus ganas de hacer algo de provecho hazte a un lado, que estás
estorbando.
Por eso Don Frutos Snacks mola tanto,
porque evoca estos preciosos valores tan olvidados cuando se trata de
algo tan serio, hacer dinero.