La primera de las Tortugas Ninja es la
mejor. Luego la segunda, luego la tercera y por último el especial
de Navidad. Así, en patético orden decreciente.
¡Duro camino ese! Crucial se nos
antoja seguir el inverso: ir de menos a más. Ir de más a menos es
de estrella que se apaga. Ir de menos a más de Big-Bang.
Imagino que tú de más a menos. Si te
lo veo en la cara. Pero eso es muy fácil, hombrecillo. ¿He de
recordarte la fábula de La Tortuga y la Liebre? No entiendo cómo
leyendo las mismas cosas de pequeños tú hayas podido salir tan mal.
Existen muchas teorías sobre lo que
está pasando en el planeta, algunas más molonas que otras. La mía
es que hay gente que no tiene el procesador adecuado. Así, genético.
Desde luego que un mal ambiente te plancha si no tienes un procesador
Nvidia como mínimo, pero me temo que el componente genético es el
tabú final.
¿Cómo vas a decirle a alguien que no
vale ni para tirar del carro? Pues muy fácilmente. Las viejas del
pueblo lo hacen constantemente. Mi abuela tuerce la nariz si alguien
que está cerca “no es buen perro”. Los viejos de pueblo lo ven
fácil porque no tienen el cerebro embotado de redes sociales.
Sin embargo en la ciudad no se puede
decir porque atenta contra los valores por los que lucharon nuestros
padres y tal Pascual. ¡Pues felicidades, papás! Menuda patraña
inextricable que habéis montado con eso del pensamiento urbano, si
es que ese ente existe.
Este es un inútil y este vale. ¿Es
ese un pecado tan grave? Coño, yo creo que no. Es que si no podemos
decir eso estamos a merced de timadores.
Que sí, que es duro ser un mierda.
Pero más duro es aguantar un mierda, te lo digo yo.
¿Qué puedes hacer? Reconfigúrate el
ADN, como El Profesor Chiflado. ¡Yo qué sé!