Esto es pegamento en spray, que sirve
para impregnar una superficie grande de forma uniforme. Así no te
las tienes que ver con churretones de pegamento ni con nada que se le
parezca.
Este spray es así regular para
respirar. Hoy la silicosis no se cría en las minas de León, se cría
en las salas de montaje de las agencias de publicidad.
El padre de mi amigo Toni del pueblo,
en León, que le habían prejubilado de la mina, comía no sé qué
raíz que era buena para la silicosis. En teoría te comías esa raíz
y te limpiaba los pulmones.
El padre del Neno, el alias de Toni,
era aficionado a las movidas así naturistas porque había sido
marinero de esos que van por los siete mares, y ese tipo de vida te
empuja un poco a tener fe en la madre Tierra.
Una vez me contó, cuando nos
encontramos en El Camino de la Central, el paseo que solemos hacer
los caminantes de mi pueblo, que había dejado por ahí hijos a punta
de pala, alrededor de todo el globo, de mujeres que se había tirado
ahí a pelo y a tomar por culo. Para mi eso es increíble, yo si dejo
un niño por ahí luego me pasaría la vida reconcomiéndome la
conciencia.
Pero el padre del Neno no, el padre del
Neno estaba más contento que unas castañuelas con su obra. ¡Di que
sí, tío!
Me pregunto cuántos hijos ha dejado
por los siete mares el diseñador gráfico que está en la sala de
montaje con el Spray Mount. Me da que ni uno. El padre del Neno-7
Tú-0. Lo siento, tío.
El padre del neno te gana en lo
crucial: en la reproducción de la especie.
Amigo, estás demasiado poco pendiente
de tu polla.
Tu raíz, que es tu polla, se ha
convertido en un tubérculo raquítico. ¿Qué vas a hacer? Porque
esa raíz no la puedes enseñar en el trabajo. Tienes que esconderla
porque es indecorosa, te puedes buscar un buen lío si vas en el
trabajo como el padre del Toni.
Sin embargo esa raíz es la que absorbe
los nutrientes de la tierra que necesitas para vivir, que es viajar
por los siete mares y dejar preñadas a mujeres indígenas. O sea,
que lo que te da la vida en naturaleza en tu entorno te la quita,
porque te despiden. Difícil cuestión.
Tu follaje es más deslumbrante que el
del padre del Neno. ¡Mira qué camisa de Sportivo! ¡Mira qué
Yumas! ¡Tú eres la polla! ¡La polla, tío!
Sin embargo la raíz del padre del Neno
es colosal. ¡Cristo bendito! ¡Ese hombre es una secuoya! Puede que
tenga un follaje más apagado pero a raíz te da sopas con ondas,
porque él ha preñado a 7 indígenas y tú a cero.
O sea, que él es un paleto, pero tú
eres un piltrafillas.
¿Quién gana?
Hasta que se hundió el capitalismo tú,
está claro. Chupabas de una teta que te permitía tener una raíz
más delgadita, más refinada.
Pero ¿y ahora que no está esa teta?
Estás super mustio, te veo la cara. La camisa de Sportivo ya no te
sienta bien porque has engordado. ¡Y cómo! Las Yumas están más
gastadas, pero las bambas molan más gastadas, así que eso bien.
Con lo cual ahora el paleto te gana.
Porque él tiene una raíz enorme desprovista de camisa de Sportivo,
eso sí, y tú tienes una raíz mustia que no te permite seguir
comprando camisas en Sportivo. Así que te tendrás que ir a Humana
y, de repente, parecerás el padre del Neno, pero sin su fantástica
virilidad.
Con lo cual serás un piltrafillas
vestido de paleto. O sea, lo peor de lo peor.
¡Vaya pintas que me llevas! Mira que
te lo dije.









