martes, 6 de junio de 2017

Jerseygirl

Antes de que Ben Affleck fuese Batman hacía comedias con Kevin Smith. Tampoco me parece tan mal Batman Ben Affleck. La gente es que le gusta más criticar que las patatas fritas.


¿Por qué mola criticar? Criticar mola porque te quedas a gusto. Pones a la gente en su sitio. Este va de tal pero lo despellejamos aquí entre los dos y oye, ya es otra cosa. Ya puede ir todo lo que quiera de lo que sea porque tú y yo sabemos la movida.

¡Qué buenos recuerdos criticando en el trabajo! Yo para esos menesteres me junto con las chicas, que como no tienen honor ni nobleza se lanzan a degüello.


Las chicas no tienen compasión. Por eso hay brujas y no brujos. Bueno, algún brujo habrá, pero en general hay más brujas. Las brujas son buena cosa porque tienen sed de sangre y si se la das a probar siempre, siempre van a pedir más. Así que si quieres quedarte a gusto poniendo en su sitio a algún cabrón búscate una bruja.

Las chicas no tienen en cuenta los atenuantes. Las chicas ven una paja en el ojo ajeno y pasan de la viga en el suyo tan tranquilamente. No voy a juzgar a las chicas porque me resultan francamente útiles para desahogarme.


Sin embargo, si te pasas de frecuentar aquelarres puedes acabar convertido en homosexual y eso no es plan. Las chicas son como las gallinas, hay que tenerlas siempre vigiladas por su bien. De dejarlas demasiado sueltas pueden perder el foco y convertir la civilización en un lugar insoportable, lleno de sonidos agudos.

¿Existen las chicas que se sepan controlar a sí mismas? Seguro que sí, pero como a esas no las miro parece como si no existiesen. Las chicas que molan son las alocadas, las inconscientes, las que necesitan ser salvadas de sí mismas. Lo interesante de las chicas es convertir una gallina clueca en una dama de la que no avergonzarte.


A mi me interesa el viaje, no el destino. Si a ti sólo te interesa el destino lo tienes muy fácil, sólo tienes que desembolsar dinero por un producto acabado. Pero a mi me gusta construir mis propias herramientas. Por el mismo motivo me gusta formar a mis propias mujeres.

Las mejores soluciones siempre son las ad hoc, como ya sabrás, amigo con formación empresarial. Son más caras y complejas de implementar pero dan mucho mejores resultados. Por eso yo me rodeo de gallinas cluecas. Porque soy un empresario a la antigua.