Con este desodorante hueles que te cagas. ¿No?
Yo ya no me echo Axe porque soy viejo. Los viejos nos echamos desodorantes con propiedades dermatológicas porque valoramos más la salud de nuestra piel que las tías que nos podamos trincar, porque eso de trincarse tías cada día da más pereza. Apetece más ver el fútbol.
¿Que quieres que te meta qué dónde? Anda, calla, loca, que está jugando el Granada. ¡El Granada!
Las mujeres tienen que entender que nosotros queríamos follar cuando no querían ellas. Ahora te jodes, ajquerosa.
¡Pues anda que no me he tenido yo que comer sinsabores porque la niña era tímida! Ah, que ahora se te ha quitado la timidez, ¿no? Bueno, pues a mi me ha entrado la vejez. Te jodes.
Chica, qué quieres que te diga. Que ya no me pareces tan irresistible. Además, te has vuelto vieja. Las viejas apetece menos follárselas. ¿No lo sabes? Pues sí, sí. A las viejas apetece menos follárselas.
De apetecerte follarte a una vieja te apetece follarte a una vieja que no sea la tuya.
Total, que te pires. Que está jugando el Granada.
¿Que me vas a poner los cuernos, dices? Sí, fijo. ¿No ves que eres vieja? ¿Quién te va a hacer caso?
