Le viene de perillas el nombre Chunky a
este rotulador, porque es una mierda. Chunky suena a chungo, a
cluncky.
Guardo rotuladores que son una mierda
porque de vez en cuando viene bien una pincelada de mierda.
Tengo como objetivo pintar algún día
un cuadro con mierda. No, no hablo de metáforas ni de nada. Mierda.
Mierda cagada por mi y por mi mujer, si tengo suerte.
No, no es una denuncia. No es eso de
“Mierda de Artista”. No, no. Que me parece que quedaría bien.
Eso es todo.
La mierda seca tiene una textura guay.
Seguro que cuando le da la luz ofrece significativos matices. Le
echas un poco de barniz de ese para que se fije y queda dabuti.
¿Veis qué fácil es la vida? No hay
que pensar como si uno fuera errejonista, que intenta resolver todos
los problemas usando el cerebro. La mayoría de problemas se
resuelven a patadas. Pensar demasiado es para gente que todavía no
es inteligente y necesita ejercitar ese músculo.
Cuando uno ya es inteligente se dedica
a vivir feliz, no a pensar. Cuando uno está cachas no sigue haciendo
pesas, ¿no? Pues esto es lo mismo.
A mi me duele la cabeza de gente que
piensa pero no es inteligente. Gente que piensa como apretando el
acelerador a tope pero sin haber metido la marcha. Gente desenfocada,
que mucho ruido y pocas nueces.
Si quieres ser inteligente tienes que
leer menos y hacer más. Supongo que no aprendiste tu idioma materno
estudiando, ¿no? Lo aprendiste siendo feliz y lo de hablar y
entender lo que te dicen te salió como sin querer. Esa fue la única
etapa de tu vida que fuiste inteligente.