lunes, 6 de marzo de 2017

Aplicación bordada Spiderman 1 Unidad

Si vas a Pontejos puedes comprar parches de tus personajes de dibujos animados favoritos y pegarlos a tu ropa. Si quieres que no se caigan nunca tienes que coserlos, pero coser no es tan fácil como parece en las películas.


Si hace unos años, no tantos, ibas por la vida con mis años con parches de Spiderman te echaban al Manicomio Francisco Franco. Hoy, por contra, te contratan en Snapchat y te hace una mamada una mujer negra, encantada de que seas tan guay.

Por tanto este es un motivo práctico por el que estar a la última es bueno.


Ayer tuve una revelación, una de tantas entre las que convivo. Percibí, con claridad, que la próxima moda no es dejar salir al niño que hay en ti, porque ese ya está suficientemente fuera; ahora lo molón es sacar al viejo que hay en ti.

El viejo que hay en ti es ese que le encanta subirse los pantalones hasta los sobacos. El viejo que hay en ti no habla, sólo vegeta. No le interesan las noticias. El viejo que hay en ti sólo quiere paz a su alrededor, no por ningún motivo hipster extraño, sino porque es viejo. Los viejos se mueven lento y ya nada les hace gracia porque han trascendido la sociedad de consumo.


La sociedad de consumo es un invento de niños para niños. Los niños se aburren constantemente y necesitan estímulo. Los viejos, sin embargo, son aburridos pero no se aburren. Los viejos se parecen a las plantas.

La sociedad de hoy es el resultado de una humanidad que ha comprendido que es bueno sacar al niño que hay en nosotros. Pero yo, como me meo en todos vuestros logros y voy radicalmente por delante de todas vuestras certezas, digo que lo próximo es sacar al viejo que hay en nosotros porque es bueno.


La sociedad dejará de producir bienes innecesarios cuando una horda de viejos dejen de comprarlos. Los viejos sólo necesitan un espacio donde ser viejos.

Sólo sacar el viejo que hay en ti traerá el equilibrio a La Fuerza. ¿No es evidente el porqué de mi razonamiento? Pues claro que sí. Tú no lo pillas porque eres tonto, pero está clarísimo.