Hoy presentamos unos snacks que aúnan
dos mundos, cosa que tanto me gusta a mi. Por un lado son snacks
horneados y no fritos, o sea, que son natu-slow-podemita friendly, y
por otro tienen sabor a queso como los snacks de siempre. O sea, una
cosa equilibrada.
He probado snacks rollo
natu-slow-podemita hardcore y, lo siento, amigos, no me gustan. No es
un “no me gusta” intelectual, es un “no me gusta” de que
luego me duele la tripa. He probado unos guisantes horneados y luego
me sentí mal. He probado unas algas tipo chips y luego me han
sentado mal. Yo lo he intentado, tíos, pero vuestro rollo no me
acaba de llenar. Lo siento, de corazón.
Sin embargo MisterCorn, esa marca de
Grefusa que inventó los kikos blandos, ha vuelto a dar en el clavo.
Ha hecho lo más sensato: quitar lo malo de los snacks tradicionales
y poner lo bueno de los snacks de nueva generación. Y al revés: a
los snacks de nueva generación les ha puesto lo bueno de los
antiguos. Ya está. No tiene más.
Francamente, esto no son más que
bolitas al queso con una base más sana. No tienes motivos para
negarte a tragar esto. Es sano y sabe bien. Podemos y PP al fin
juntos.
Una bolsa grande cuesta un euro. P.V.P.
recomendado, también por mi.
Cómo han cambiado los tiempos y qué
poco a la vez. Hace hoy justo 30 años comía una bolsa de Bolitas al
Queso de Cheetos. Hoy como MisterChips sabor a formaggio al horno y
me siento igual. La única lástima es que esta bolsa no trae bonitos
dibujos de un ratón mosquetero gordito. Vaya.
¡Hoy nunca dejarían que la mascota de
unos snacks estuviese gorda! ¿Qué coño pasa hoy en día con los
gordos? Los gordos también somos personas, sexys y deseables.
Los gordos somos los que mejor te
follamos, porque estamos pensando en tu coño y no en mantener la
línea.
Los que piensan en mantener la línea
no saben follar.