jueves, 18 de mayo de 2017

Atrapado en un pirado

Con Eddie Murphy es difícil fallar. Comprar Eddie Murphy es como comprar Ford, es una marca con tradición y suficiente calidad como para estar tranquilo tras soltar la mosca.


Atrapado en un pirado va de eso que todos hemos imaginado alguna vez: que somos meros vehículos alienígenas aunque parezcamos personas normales y corrientes. Tú crees que somos como tú pero ¡no! Somos una sonda exploradora de una raza allende las estrellas y descubrimos con pasmo las costumbres humanas.

Como yo he tenido la suerte y la desgracia de mezclarme con gente de todo pelaje he quedado impregnado por su esencia. Por suerte y por desgracia, insisto. Así que la idea de que yo pueda venir de la constelación de Sirio (no Siro, como las galletas) no hace que se agite mi pompis, porque me he mezclado también con gente conspiranoica.


Ey ¿quién sabe? En un mundo cuyas ideas dominantes son sandeces de la más baja estofa ¿por qué no inventarte tus propias ideas dominantes que son sandeces de la más baja estofa? Si yo hubiera aceptado las ideas-sandez que han imperado durante la crisis no quiero pensar cómo habría acabado. Como tú, igual.

Si quieres puedes pensar que ese señor es ejecutivo y es muy respetable, pero también puedes pensar, si te apetece, que ese señor lo que es es una mierda de perro cubierta con purpurina. ¿Qué más da? Ninguna de las dos es exactamente la verdad, pero ambas tienen partes ciertas. Así que si eres listo y tienes respeto por ti mismo elegirás la versión que creas que es más productiva para todos.


Mientras aterrices de pie puedes montarte la paranoia que más te apetezca. Cuanto más complicada sea la paranoia mejor creativo serás, porque un creativo se distingue por ser capaz de sacar poesía de Garcilaso de unas cuchillas para afeitarte las piernas. El único requisito es que al final todo cuadre.

Puedes pensar que la macroeconomía es una ciencia muy complicada que casi tiene voluntad propia o puedes pensar que hay cuatro hijos de puta haciéndote el lío. Ninguna de las dos te va a librar de que te hayan bajado el sueldo pero con una te sientes cómodo y con otra menos. Con cuál te sientas cómodo depende de ti, de tus características.


Puedes pensar que papá es un héroe o que papá es un jeta. Depende de cuánto quieras a papá. Puedes levantar y hundir imperios sólo cambiando el prisma desde el que los observas. Así que aquí lo único que cuenta de verdad son tus ganas de dar por culo o tus ganas de hacer algo constructivo. Lo demás son excusas para justificar con qué pie te has levantado.

¿No es la imaginación algo que te cagas de guay? De verdad, tú es que no la usas nada. La tienes de forma testimonial, de adorno. ¿No te das cuen, apiticaun, de que dentro de tu cráneo posees la herramienta definitiva para hacer un mundo superchupi? Me tienes preocupado. Es que estás a uvas, tronqui.