lunes, 8 de mayo de 2017

Smoking Brown 300 leaves

Pa 300 cigarros hay aquí. Ñam ñam.


Los ortoréxicos han de estar locos. Pero locos de atar. ¿Cómo acabas tú un día normal en este mundo de Dios sin drogas? No, explícamelo. Ah, ya. Desarrollando patologías cerebrales. Así cualquiera.

En un día normal hay que aguantar unos 50 kilos de mierda. Kilo más kilo menos. Tienes dos opciones al llegar a casa: beber y fumar o dejar que todo eso se te pudra en tu maltrecho cerebro. Tú mismo.


No, luego que tienes alzheimer. ¡Qué coño! Tú lo que tienes el mal tino a la hora de enfrentarte a la vida.

También puedes contarle tus problemas a alguien en quien confíes, pero eso es muy complicado de encontrar. El óptimo es mezclar amigos que ni fu ni fa con drogas blandas. O eso, o el alzheimer.


Además en estos tiempos no se puede hablar con nadie, porque todo el mundo está fatal. Todo el mundo tiene muchísimos problemas. No hay dinero y eso te tensa. Como te tensa lo pagas con el frutero. El frutero, a su vez, con la vieja del cuarto y esta se queda todo muñeco.

Si a todo eso le añades el capricho de sólo comer apio te puede dar un tabardillo cojonudo. Un ictus que te quedas bailando samba.


Por tanto, échate un peta, tío, que bastante mierda comes ya. Por unas caladas no vas a estar peor y te vas a sentir guay. Tu cuñado hasta te va a parecer gracioso, cuando es un orco de Mordor.

De verdad que la gente cree que es por su boca por donde entra aquello que mancha sus corazones y no sabe lo equivocada que está.