martes, 23 de mayo de 2017

Ready Mixed Paint

Tener talento es una cosa muy buena; con una mierda de perro haces una escultura. De no tener talento tendrías que gastar cantidades insultantes de dinero para cubrir tus carencias creativas.


Por eso a mi me da igual comprar esta mierda de pintura en el Dealz por 1,50€ que un tubo de óleo fino filipino. Use el óleo o use este voy a hacer una cosa cojonuda.

Casi prefiero usar esto, porque cuanto más innobles sean los materiales más noble me parecerá el resultado final. Alcanzar algo noble con medios innobles es la mayor nobleza del mundo.


Tú, por ejemplo, si quieres practicar el golf lo primero que haces es gastarte 2.000 pavos en un equipo de los buenos. Yo, sin embargo, usaré un palo de pino y una pelota de tenis y voy a ser mejor golfista que tú.

A veces no sé qué le pasa a la gente conmigo, pero empiezo a tener una ligera idea.


Claro, tú te rompes la espalda y en el mejor de los casos rascas un par de perlas. Yo lo que me rasco es la barriga todo el día, me tiro un pedo y del culo me sale un potosí. Es normal que estés rabioso.

Bueno, normal no es, es anormal, porque deberías ser feliz con lo que Dios te ha dado para ser un buen cristiano. Pero entiendo que como hijo menor de Nuestro Señor, débil ante las tentaciones del espíritu, te me revuelvas un poco. No te preocupes, Nuestro Padre se hace cargo de tu debilidad irrisoria.


Pero la culpa no es tuya; la culpa es de la sociedad, que te dice que tienes que ser creativo. ¡Tú qué vas a tener que ser creativo! Tú lo que tienes que ser es una fábrica de niños, como todos los hijos menores de Nuestro Señor, que para eso estáis. Simplemente quieres hacer algo para lo que no estás diseñado y por eso te sale mal.

Deja los asuntos excelsos para los profesionales y tú dedícate a envejecer con la mayor dignidad posible. Si te portas bien te daré una piruleta.