Un síndrome de alienígenas. Menudo
síndrome. Diablos. Un síndrome bien correoso debe ser ese.
Un síndrome de alienígenas tiene mala
pinta. Da sensación como de que te van a crecer tentáculos desde
dentro del cuerpo y te van a salir por las orejas.
Desde luego, si te tienes que tratar un
síndrome, lo peor es que sea de alienígenas. Está claro.
Es mejor un síndrome de abstinencia
facilito que un síndrome de alienígenas.
Al menos, eso sí, es un síndrome
molón. Al menos eso sí te lo llevas.
Un síndrome de alienígenas me da a
tentáculos morados. No sé por qué.
Quizás no sea tan malo tener un
síndrome de alienígenas.
No sé, todo lo que sea alien hace
moderno, ¿no?
Y a mi sólo me importa eso.