Este juego tiene un significado
especial. Me lo compré con el dinero que les saqué jugando al mus a
mis putos colegas.
A mi el mus, plim. Pero a estos les va
la vida con el puto juego. Así que, bueno, parece que un día hubo
que ponerse serio con esto de jugar al mus.
Yo soy el típico que va mirando las
mariposas por la calle porque sólo me interesan las mariposas. Pero
el día que pongo mi inteligentísima mirada en la mierda esta del
mus lo peto.
Esta pequeña época de jugar al mus
duro fue muy buena para mi, porque aprendí estrategia. ¿Cómo
aprendí la estrategia que necesitaba para ganar al mus? Jugando al
Pro Evolution Soccer 2014.
Yo el mus como me lo explicaba Ricardo
no lo entendía. Ricardo tiene un cerebro distinto al mío, yo no
entiendo nada de lo que pasa ahí dentro. Pero cuando hago las cosas
a mi manera me salen bien.
Al mus se gana como al fútbol desde un
punto de vista estratégico. Yo al fútbol desde un punto de vista
estratégico gano considerando el 100% del tiempo la defensa y, sobre
esa base, ejecutar el juego lo mejor que se pueda.
No sé explicarlo mejor. Pero se gana
así. Este Final Fantasy de Wii es la prueba.
Si no tienes una base sobre la que
ejecutar tu juego no puedes ejecutarlo. ¿Cómo diablos se jugaba al
fútbol antes de Mourinho? Yo no lo entiendo.
La estrategia del fútbol y el mus se
aplica a todos los campos de la vida. Por eso no sé qué haces que
no estás jugando al Pro Evolution Soccer 2014. Yo antes de jugar a
ese juego no entendía nada de nada de la vida. ¿Tienes coach?
Joder, tío. Lo haces todo al revés.