jueves, 20 de abril de 2017

Gum Gum

Cuántos enigmas despierta este helado. Uno por lo menos.


¿Está recubierto por una capa de chicle o sólo el palo es de chicle? El cartel pone que el palo es de chicle, así que eso seguro. Pero poco chicle me parece ese para un helado que se llama Gum Gum. El Nifty tenía palo de chicle y tenía la gracia de que era un fantasma. El palo de chicle era un extra, pero no con suficiente enjundia como para llamar al helado con un nombre que evoque chicle.

Por lo tanto me da por pensar que la capa rosa que recubre el helado es de chicle. Pero eso es imposible. Si te comes la capa tendrás un chicle en la boca y te molestará para comer el resto del helado. ¿Qué coño es esto?


De Nestlé tenía que ser. Frigo jamás se permitiría estos sinsentidos. Es evidente que en Frigo trabajan maestros heladeros. En Nestlé deben trabajar una panda de cuñados, porque si no yo no me lo explico.

Pueden pasar dos cosas: primera, que sólo el palo sea de chicle. Pues mal asunto. Aunque la capa rosa exterior recuerde visualmente al chicle, insisto, poco chicle me parece ese para llamar a un helado Gum Gum. La segunda cosa que puede pasar es que la capa exterior sea de chicle. En tal caso el nombre se justifica pero comer el helado se antoja ¡incómodo!



Este helado puebla mis pesadillas. Y la única opción que tengo para salir de este laberinto es comprarlo. ¡Maldita sea! ¡Maldita sea!

Pues esto es lo de siempre: a ver quién es más cabezón. ¡No sabe Nestlé con quién ha topado!


Yo soy tan cabezón que me estalla la cabeza. Soy capaz de mudarme a Marte sólo para no cruzarme con ese vecino que una vez me dio una respuesta poco delicada. ¡Para que aprenda!

La ventaja es que conozco gente.