viernes, 21 de abril de 2017

Renault Fluence

Bienvenidos al Especial Naming. Hoy aprenderemos cómo hacer un nombre prefabricado repugnante. ¡Allá vamos!


Fluence quiere decir dos cosas, como todos los nombres repugnantes de laboratorio de baratillo: por un lado recuerda a Influence, influencia, porque este coche es una berlina. Las personas que conducen berlinas tienen influencia, o al menos eso creen.

Por otro lado recuerda a fluir, porque alguien que se compre un Renault Fluence no es un cuñado cualquiera: tiene un punto juvenil, y los jóvenes fluyen, saben abandonarse a las olas, etc.


Y eso es todo. Creo que hay una carrera de 4 años que enseña esto.

Poco más tengo que decir de este coche. Que me lo compraría si una mañana me despertase irónico, pero poco más.


El naming, eso sí, es un buen ejercicio básico para el cerebro. Si nunca has utilizado el cerebro es buena cosa que gastes unos cuantos folios pensando un nombre con gancho. Al principio resulta difícil, pero es como todo, que si no practicas si haces un poco de ejercicio tienes agujetas. Pero cuando te acostumbras no te duele ni nada.

Yo, ya ves, tanto trabajé escribiendo textos publicitarios y pensando conceptos del mismo tipo que ahora no tengo que pensar. Me sale solo. Es como si entrenas mucho para correr carreras, que luego las corres como sin querer.


Había que hacer algo para matar el rato, ¿no? ¿Tenías una idea mejor?

Yo no tuve ninguna, al menos.