Este es un mando que se tiene que
comprar aparte si quieres jugar a los juegos de Wii de forma clásica,
no con el Wiimote que te viene de serie. Algunos juegos exigen el uso
del Wiimote y otros no.
Es bueno tener este mando porque sirve
muy bien para jugar a los juegos de la consola virtual, uno de los
inventos más estupendos de Nintendo. Te puedes bajar juegos clásicos
de consolas antiguas a cambio de Wii Points, que puedes comprar on
line con tarjeta de crédito o en tiendas físicas en una tarjeta con
un código. En los últimos tiempos estas tarjetas están en todas
partes, así que seguro que las conoces.
Este mando me lo compré cuando aún no
existía Wallapop y el rollo guapo era Milanuncios. Milanuncios es
the real deal, the shit. Milanuncios es el Forocoches de las páginas
de venta de segunda mano. Alguna vez tendré que volver a hacer mis
compras en Milanuncios, porque es como esa charcutería que aunque tú
te vayas a El Corte Inglés una temporada ella va a seguir ahí.
Milanuncios mola muchísimo más que
Wallapop porque es más auténtico.
Milanuncios tiene un diseño “en dos
patás”, que es como me gusta a mi el diseño. Un diseño “en dos
patás” significa que el autor está más preocupado por ofrecer un
producto de calidad que en diseñar un packaging molón. Los
packagings molones suelen vaticinar productos de calidad discreta, ya
que para hacer un producto de alta calidad hay que tener unas
cualidades diferentes a las que hay que tener para hacer un packaging
molón.
Yo ayer estuve buscando por Internet
dónde podría comprar un hierro para marcar reses, por unos asuntos
que tengo entre manos. Encontré una página de una empresa que
llevaba haciendo estos hierros desde 1917. Te explicaban que estaban
hechos más gordos por detrás que por delante para que así la marca
sobre la piel del animal quedase más definida.
Naturalmente, la página de esta
empresa era una chapuza. Tenía faltas de ortografía y las letras
acentuadas no aparecían. Había un slideshow completamente inútil
que está claro que el primo del dueño de la empresa, que es el que
sin ninguna duda ha diseñado la página, le dijo a su primo que
convenía ponerlo porque hacía moderno.
Esta página es la que augura que los
hierros para marcar reses que allí venden son de altísima calidad,
superior. No vas a encontrar unos hierros mejores que los que venden
en esa empresa, estoy seguro. El motivo es porque esa gente dedica el
99% de su tiempo a hacer hierros para marcar reses y el 1% a hacer
páginas web. Por eso hacen unos hierros tan buenos y unas páginas
web tan malas.
Puede que un día llegue un enterado de
ciudad a Jerez, que es de donde es oriunda la empresa, y le diga a
estas buenas gentes que el diseño de su página web está outdated.
Les dirá que es antiguo, porque ellos no entienden lo que coño
significa outdated ni puta falta que les hace. Aquí pueden pasar dos
cosas: una, que cojan al enterado y lo tiren al pilón del pueblo
donde esté sita la empresa. Esto querrá decir que merece la pena
seguir comprando los hierros en esta empresa porque todavía tienen
el espíritu necesario para fabricar este tipo de hierros.
También puede pasar que se dejen
seducir por los cantos de sirena y decidan que ya es hora de hacer
una página web más acorde con los tiempos que corren. Esto querrá
decir que, sintiéndolo mucho, es hora de buscar una empresa mejor,
que sepa que su negocio es hacer hierros de marcar reses de máxima
calidad, lo que implica tirar a los enterados de la ciudad al pilón.
¿Cómo es tu página web? La mía es
del tipo “en dos patás”, porque quiero que la gente entienda que
a mi venderme o no me importa tres cojones puestos uno encima del
otro. Quiero que entiendan que yo me dedico a hacer un trabajo
sobresaliente, de matrícula de honor. Mi esfuerzo no está puesto en
que tú te creas que hago un trabajo muy bueno, está puesto en hacer
un trabajo muy bueno. Si tú no eres capaz de captar este mensaje me
temo que tú y yo no tenemos nada de lo que hablar, porque no me
gusta hacer negocios con gente de tan rala inteligencia. Será mejor
que sigas tu camino y busques a alguien de menor nivel porque yo te
voy a echar, con regocijo, al pilón.
Sin embargo, si has entendido lo que te
quiero decir ¡enhorabuena! Eres digno de mi compañía. Tú y yo
podemos tener una relación feliz que puede durar muchos años. Está
claro que no eres un tipo cualquiera, como yo tampoco lo soy, y las
personas como nosotros nos entendemos muy bien. Pasa, amigo, y
permite que te invite a un refrigerio.
¿Qué te apetece? ¿Agua de grifo? ¡Tú
eres de los míos!