Esta es la típica peli que si quieres
quedar de refinado, de exquisito, tienes que hacerte una camiseta de
ella. Es un cuento perfecto, un relato puro y limpio de los que te
hacen reconciliarte con la raza humana, porque por ahí, en alguna
parte, hay alguien que piensa y siente como tú: bien.
Esta peli trata de un robot cuya misión
es destruir la Tierra y se estrella en esta. Con tan buena o mala
suerte que al hacerlo se golpea en la cabeza y de ser un robot malo
pasa a ser un robot bueno. Lo que nos ha pasado a algunos, me temo.
Total, que se hace amigo de un niño y
juntos le dan una lección a aquellos que nos quieren tiranizar
basándose en su miedo a lo desconocido. Fin.
¿Qué hubiera pasado si yo no me
hubiera golpeado la cabeza al llegar a la Tierra y hubiera sido ese
robot destructor que era y ya no soy? Me temo que vuestro fin hubiera
sido inminente. Por puro placer os hubiera aplastado con mis grandes
pies y me hubiera comido a vuestras familias, uno a uno o todos a la
vez.
¿A quién me hubiera comido primero? A
ti, el último, para que antes de morir vieras cómo tu familia
muere. También te digo que me los hubiera comido lentamente,
empezando por las extremidades y tratando de no dañarles demasiado
pronto órganos vitales para que así hubiesen permanecido vivos
mientras le infligía el dolor más infernal que un robot pueda
infligir. Primero los piececitos, ñamñamñamñam, luego las
manitas, ñamñamñamñam. Luego les hubiera arrancado las
piernecitas y los bracitos y me los hubiera comido uno a uno, poco a
poco.
Quizás, estoy pensando, no me hubiera
comido a los miembros de tu familia uno detrás de otro, sino que me
hubiera ido comiendo primero las extremidades de todos para que así
se quedaran todos juntos como troncos con cabeza. Y así, colocarlos
como a 10 bolos delante de ti y ofrecerte una roca, a modo de bola de
boliche, Pablo, para que los derribases, burlón. Si no haces pleno,
te como a ti.
No, te voy a comer de todos modos. No
sueñes.
¿Cómo te hubiera comido a ti? Bueno,
¿para qué comerte si teniéndote como mascota tu dolor se puede
prolongar durante más tiempo? Por mi parte sería un error. Es mejor
meterte en una jaula y hacerte heridas leves, pero tampoco demasiado
leves, y pasar el día echándoles sal y vinagre, como a una
ensalada. Te diría “¿Cómo quiere de aliñada la ensalada el
señor?” y cuando tú me dijeras “¡No, por favor, no, no, más
no, te lo suplico!” yo me reiría a carcajadas y te aliñaría esa
herida de perro como un cabrón. Y tú ahí, “¡Aaaaaaaaaaaaah!”,
y yo “¡Jajajajajajajajajaja!”.
Ah, qué divertido. ¿Ves? Hay que ser
bueno. Porque si no eres bueno a lo mejor el robot diabólico que
duerme dentro de mi se despierta y te hace pagar por todos tus
pecados como un jinete del apocalipsis. Y ahí se acabarían las
risas y empezarían los lamentos.
Esta peli está dirigida por Brad Bird,
que luego recaló en Pixar para dirigir Los Increíbles y
Ratatouille. Y si Dios quiere pronto nos traerá Los Increíbles 2.
También dirigió aquel gran videoclip que era Do the Bartman,
el videoclip del primer single del LP The Simpsons Sing the Blues.
Como veis, Brad Bird es uno de esos
tíos a los que hay que admirar, porque nos trata de decir con su
obra que hay que ser buenos. Y que dentro de todos nosotros hay
alguien grandioso que si se le riega y se confía en él puede ser
capaz de hacer cosas Increíbles.
En mi caso es al revés, a mi se me ve
claro que soy un tío increíble, pero dentro de mi duerme el puto
diablo. Así que no le despiertes si no quieres acabar crucificado
como un pequeñísimo ratón.