miércoles, 3 de agosto de 2016

Tekken Tag Tournament 2

Este es uno de esos juegos que hice de puta madre en comprar. Te cuento.


Como bien sabes, la llegada de la Playstation a mi me hizo apartarme de los videojuegos, como le pasó al Angry Video Game Nerd. O sea, que siento que estoy dentro de un halo místico de grandes personas, de grandes genios. A las pruebas me remito.

Sin embargo, pues oye, como tú te sentiste parte de la movida de los recreativos no querías que aquello desapareciese así, de la noche a la mañana. Así que intentabas (vamos, intentaba yo) pillarle el rollo a alguna de aquellas nuevas maquinitas de polígonos. Al Daytona le pillé el rollo, al... Bueno, a pocos más. Yo soy un chico 2D.


A uno que intenté pillárselo porque, oye, yo medio pilotaba el Street Fighter así medio bien, un poco, fue al Tekken. Coño, si piloto el Street Fighter aquí lo tengo todo medio hecho, ¿no? Tampoco será tan distinto, ¿no? Mmmmmmm.

Una cosa que me rallaba de la oleada de clones del Street Fighter que llegaron detrás de él era el empecinamiento por diferenciarse en los controles. A ver, tíos, Street Fighter funciona de puta madre. ¿Por qué poner la acción de cubrirse en un botón en vez de dándole al mando para atrás, como te sale de natural, como les dio por hacer en Mortal Kombat? Son ganas de tocar los cojones, son ganas de hacerse el diferente cuando no lo eres en absoluto. Tío, se te han adelantado y lo han hecho mejor que tú, acéptalo. Sé humilde y sigue la senda recta, que es la que ellos han marcado. Así hace un hombre.

En el puto Tekken hicieron lo mismo.

-Ah, otro Street Fighter, ¿no?
-¡Nononononono! ¡Este es MUY DISTINTO! ¿Ves? En este hay cuatro botones, uno para cada extremidad del luchador. Puño derecho, puño izquierdo, patada con la izquierda y patada con la derecha. ¡MUY DISTINTO!

Vale, vale.

A mi eso, mira, me ralla. Se nota que es una idea nacida de “¿Cómo podemos diferenciarnos de Street Fighter?” en vez de “¿Cómo podemos hacer un juego de lucha que mole?”. Cuando te haces la segunda pregunta lo que haces es un juego exactamente igual que el Street Fighter, porque es el mejor, sólo que cambiando los personajes y los movimientos y poniendo los que te molen a ti. Ya está. No te flipes. Capcom lo hizo antes y mejor que tú.

Aún con todo, el paso del tiempo ha mejorado a Tekken. De aquel Frankenstein mercadotécnico ha resultado una saga con un estilo de lucha con mucha personalidad, como a veces pasa en la cultura pop. Aunque Monster y Rockstar son burdas copias de Red Bull hay que reconocer que en su burdez hay personalidad, y mucha. Así que se les perdona. La cultura pop tiene estas cosas, retorcidas, asquerosas, infrahumanas. A Tekken le pasa igual.


Así que Tekken está bien, aún con todo lo dicho, todo lo escupido. Los saltos no sirven para casi nada, como en las peleas de verdad. Cuentan más las hostias como panes, como en las peleas de verdad. Los personajes son más lentos, como en las peleas de verdad y en este Tag Tournament peleas dos contra dos, como suele ocurrir en las peleas de verdad. Total, que Tekken podríamos decir que es “más realista” que Street Fighter, aunque a mi eso me parece como decir que, no sé, que un Hummer es mejor que un Rav4. No, tío, lo que es el Hummer es una macarrada, el mundo podría pasar perfectamente sin los Hummer. Pero no podría pasar tan fácilmente sin los Rav4. Con Tekken con respecto a Street Fighter pasa lo mismo.


Así que nada, aquí me tienes, intentando pillarle la lógica interna a un juego que me temo que no la tiene. Lo único que hago es dar dos veces adelante+patada y el personaje que me pille suele dar una hostia que te cagas que quita media vida. Nada de brillantes partidas de ajedrez como pasa en Street Fighter, no. Aquí es endiñar la hostia y ya está, no sé, es como para tontos.

Pero bueno, también me lo parece Monster y me acabo de meter uno.